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By Okuniya 0 comentarios

~ [HyunMin] ~ Desde la otra noche

CAPITULO 2

• ¿Dónde estoy? – decía JungMin – Dios… que dolor de cabeza… - añadía al notar que la luz del sol le daba en los ojos. No se había percatado aún de quién estaba a su lado en la cama.
• Dios… no recuerdo nada… - se quedó mirando al techo – No acabo de recordar nada… Lo único que recuerdo es a HyunJoong… - decía a la misma vez que a su mente llegaban todas las imágenes de lo que había ocurrido con su hyung esa misma noche, y a la vez que se giraba y veía a su compañero aún dormido en la cama.
• No… no puede ser… ¡¡Se puede saber que has hecho Min!! – se recriminaba una y otra vez, a la misma vez que se quedaba totalmente en la luna mirando la expresión que tenía su hyung mientras dormía. La verdad es que no se había parado a mirarlo de cerca… pero tenía una expresión tan dulce durmiendo…
• ¡¡Vamos espabila!! – decía una parte de él. Pocos minutos después, salía de la habitación de su compañero sin hacer ruido, evitando que este se despertara y sin dejar a penas una nota.

Una hora a penas después de que Min se marchara de la habitación, HyunJoong comenzó a despertarse, mientras con sus manos buscaban entre las sábanas el cuerpo de Min, pero al no verlo allí se despertó de golpe.

• ¿Por qué has salido corriendo así? – se preguntaba hacia sí mismo. La verdad es que él no se arrepentía de lo que su compañero y el habían disfrutado la noche anterior, y menos aún cuando él había estado intentando que este se diera cuenta de que le atraía, pero por lo visto Min si que se arrepintió, o al menos eso pensó él.

Inmediatamente después de despertar y desperezarse, se pegó una ducha… que falta le hacía y más aun después de la noche que pasó ayer. Cuando entró en la ducha se dio cuenta de un pequeño chupetón que llevaba en el cuello, e intentó recordar en qué momento Min había conseguido dejar su marca ahí… pero no consiguió recordar. 10 minutos después, más o menos, el líder salía de la ducha completamente renovado y dispuesto a disfrutar del día.

Se vistió, y se marchó seguidamente a desayunar. Mientras iba por el pasillo, algo llamó su atención. Min estaba asomado a una de las ventanas que daban al parque central del hotel… La verdad es que se veía algo centrado en sus pensamientos, estaba completamente en su mundo.

• Buenos… buenos días – dijo el líder con algo de miedo.
• Oh!! Buenos días Hyun!!¿descansaste bien? – decía Min con la mayor naturalidad del mundo.
• Em… sí, claro que descansé bien…¿y tú? – preguntó.
• Yo también descansé bien… aunque me levante con dolor de cabeza… - añadía Min.
• Supongo que será por el alcohol… - decía el líder – la verdad es que bebimos mucho… - terminó de decir.
• Escucha… - dijo llamando la atención de su compañero que aun miraba por la ventana – lo de ayer… - añadió siento interrumpido.
• ¿Vamos a desayunar? – dijo Min cortando a su compañero de forma radical. La verdad es que para Min todo era algo confuso… ¿Desde cuando le gustaban los hombres?, era la pregunta que se repetía una y otra vez… pero siempre le venía a la cabeza… “Tranquilo… fue culpa de la borrachera que llevabas encima”…
• Em… sí, vamos… - decía HyunJoong que aun se reponía del corte que su compañero le había dado antes de acabar de hablar. Ya no consiguió dirigirle ni una sola palabra en todo lo que quedaba de día, ya que cada vez que se le arrimaba para decirle algo, el otro le salía huyendo, era completamente frustrante.

La verdad es que para Min, era un poco complicado de asimilar. Se había acostado con el líder del grupo, nada más y nada menos de HyunJoong, el amado por muchas mujeres en el mundo, y él, había sido el único capaz de llevárselo a la cama con… ¿un beso?... Todo era un poco raro… porque uno no es capaz de decirle que si, y de hacer tal cosa sino siente al menos algo… o al menos, eso es lo que el líder siempre les había dicho… pero, todo podía cambiar.

• Asshhh!! ¡¡No pienses en él así!! – se decía para sí mismo Min - ¿Y si le dejo una nota?... – añadía pensando en que su compañero estaría preocupado, así que no se lo pensó y se puso a escribir.
• “Perdona por mis constantes huidas. Aún no he acabado de asimilar lo que ocurrió anoche entre nosotros, todavía no creo que ocurriera… ¿Por qué no me paraste?. Tenemos que hablar.”